Empiezan a llegar los equipos a tierra nipona donde ya se respira el inicio de la competición más importante a nivel clubes, el Mundial.
Los equipos participantes son los campeones de cada continente más el campeón japonés, en esta edición el Urawa Red Diamond se coronó campeón japonés y asiático por lo que le abrió la puerta al Sepahan iraní que se consagró subcampeón. Justamente el conjunto iraní y el Waitakere United (campeón de Oceanía) jugarán una eliminatoria previa para entrar a los cuartos de final donde los espera el Urawa, de esta eliminación sale el semifinalista que enfrentará al Campeón Europeo, el Milan de Kaká recientemente elegido como mejor futbolista del año.
Del otro lado la llave es más pareja por lo menos en la previa, el Campeón Africano Etoile enfrenta al Pachuca mexicano ganador de la CONCACAF, al que resulte victorioso lo estará esperando en la semifinal Boca Juniors, primer representante argentino de esta competencia en la que por primera vez no participará un equipo brasilero, vale recordar que el Xeneise liquidó en la final de la Libertadores al Gremio, y además dió la vuelta olímpica en tierra carioca.
La lógica indica que en la final tendrían que enfrentarse el Campeón Europeo con el Sudamericano por la calidad de sus jugadores, el Boca de Palermo y el Milan de Kaká, los dos equipos con más títulos internacionales del mundo en lo que sería además una reedición de la final intercontinental 2003 ganada por el Xeneise en definición por penales.
Ya entramos en la cuenta regresiva, Boca quiere toda la gloria, y otra vuleta.
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